Por dos razones es innecesario traer el nombre de quien hablaré. Se trata de un “intelectual” más o menos famoso en La Laguna, un sapito célebre por su identificación con el pensamiento ñoño de nuestra fanfarrona pequeña burguesía. No menciono a este mutante de Toby con átomos de Enrique Krauze porque
a) Nunca ha tenido ideas propias, sólo ocurrencias, por lo que da exactamente lo mismo mencionarlo o no.
b) Tiene estrechos contactos relacionados con hombres que pueden afectarme laboralmente.
Según sé, este pedazo de tamal tiene varios espacios en los medios de comunicación regionales. Hace poco lo escuché y, como siempre, quedé azorado por su simplonería y por su abuso del lugar común. Entre paréntesis debo decir que mi amigo Ray Tuda y yo casi defecamos de risa al comentar las estupidísimas opiniones de Toby Krauze, como le decimos. Pues bien, ¿qué expresó dicho tarolas el 7 de julio de 2006? Lo cito de memoria.
a) Sostiene que él nunca creyó que AMLO fuera un peligro para México, sino a lo mucho “un estorbo”. Pasadas las elecciones afirma contundente, sereno, racional, que él no se tragó aquella especie, pero seguro nunca evidenció tal muestra de lucidez antes del 2 de julio. Mañoso o tonto (mañoso y tonto), jamás cita ni censura al culpable de la campaña nazi que él (inteligente como es) nunca creyó.
b) Con una cadencia discursiva de locutorcillo según él muy persuasivo, invoca la gran responsabilidad de los ciudadanos que contaron los votos en la jornada cívica ejemplar del bla bla bla para decir que ya, revisadas las actas, el rollo se acabó, ganó el PAN y todo lo que intente el PRD serán “patadas de ahogado”. ¿Y el TRIFE? ¿No sabe que es absolutamente legal cualquier impugnación? Animal.
c) Enfatiza que el PRD reclama y reclama, “pero no dice nada sobre el DF”. Este tipo es un verdadero menso. Nadie dice nada sobre el DF como nadie dice nada sobre Guanajuato, Jalisco y Morelos, zonas del país donde hubo elecciones locales que dejaron ganadores por goliza, inobjetables.
d) Luego de rezongar con ironías pendejas y sarcasmos que ofenden hasta a la inteligencia de los asnos, remata diciendo que el “estorbo” llamado AMLO nunca debió salir del “platanar” tabasqueño. Mil veces imbécil. El candidato que nunca debió salir del platanar obtuvo, según la torcida sumatoria oficial, 236 mil votos menos que el “ganador”, y esto sin el aparato del Estado a su merced, si los ultros inaugurando en México el terror propagandístico y sin Diego Zavala y sin el IFE y sin Ugalde y sin los empresarios y sin Televisa y sin el clero panzón y sin Victoriano Huerta Fox.
Estas paparruchas se avienta todos los días el intelectual más admirado por nuestra bonita sociedad lagunera. Sapito pendejo: no sabe cuánto disfrutamos sus radiografías de la realidad.