Una apunte casi de socialitos: en 2007 celebraremos aniversarios (natalicio o muerte) de varios iconos contemporáneos. Más adelante les dedicaré un texto a cada uno; hoy apenas los menciono a las carreras.
Frida Kahlo nació el 6 de julio de 1907. Se cumple pues, exacto, el aniversario cien de su llegada al mundo. De vida literalmente accidentada, sufrió poliomielitis en su infancia y años después un percance de tránsito que acabó de lastimarla. Su pintura es hoy, lo sabemos, motivo de orgullo nacional y tema fílmico, lo cual a veces torna insoportable las poses de sus muchos admiradores esnobs.
Diego Rivera murió el 25 de noviembre de 1957, hace medio siglo. Pilar del movimiento muralista mexicano, Diego es uno de los creadores más polémicos del siglo XX. Su obra es la manifestación artística de las ideas políticas que abrazó casi toda su vida, un pensamiento que a su vez inspiraba a buena parte de la comunidad artística internacional que se identificó, en el amanecer de la Guerra Fría, con el socialismo.
Enojón, sarcástico, uno de los más exquisitos escritores del siglo pasado, Vladimir Nabocov murió hace treinta años, el 2 de julio de 1977. Eso ocurrió en Montreux, Suiza. Célebre por la autoría de Lolita, su obra cumbre, este ex aristócrata ruso que escribía en tres idiomas armó una larga saga de novelas que hoy goza de numerosos incondicionales: El hechicero, La defensa, Pálido fuego…
Gabriel García Márquez cumple ochenta cerrados de vida. Nació el 6 de marzo de 1927 en Aracataca, Colombia, y dado lo anterior era imposible anticipar que con los años se convertiría en la celebridad literaria más destacada de cuántos escriben en castellano. Periodista, guionista, experto narrador, a los cuarenta años, en 1967, daría a la estampa la hoy cuarentona Cien años de soledad. Por ese libro y por otros, en 1982, hace 25 años, le dieron el Nobel y gracias a eso, como pleonásticamente observa cierto corrido mexicano, “su fama cada día asciende a más”.
Un aniversario poco conocido en México y que recordaré con mucho afecto es el del periodista y escritor Rodolfo Walsh, argentino que nació en 1927 y que murió asesinado por los militares de su país hace treinta años, en el 77. Valiente, ingenioso, comprometido hasta el tuétano con su pueblo, Walsh se anticipó varios años, con Operación masacre (1957), a la popularización de la novela de “no ficción”. También trabajó con fortuna el género policial.
Por último, el 15 de abril llegaremos al cincuenta aniversario de la muerte de Pedro Infante (nació en 1917). ¿Habrá algo que no sepamos sobre él? Fue un grande; lástima que la tv haya abusado de su encanto.