domingo, agosto 08, 2010

Preguntas de Bunge (V y último)



Las últimas preguntas de Bunge se refieren al tema ambiental; son, de hecho, sólo tres, pero en ellas casi está preguntado todo y creo que tampoco salimos bien librados. Hubiera sido mejor que las contestara Paco Valdés, pero bueno, lo hago yo y espero no andar tan errado.
“¿Se permiten el saqueo de los recursos naturales no renovables y la destrucción de la vida silvestre?” Sí; es un hecho que las leyes son violadas y el cuidado de nuestra riqueza ambiental es sumamente laxo; con frecuencia oímos, por ejemplo, que la tala inmoderada arrasa con más y más extensiones arboladas, o que continúa el tráfico de especies en peligro de extinción, o que los ríos padecen sistemático vaciado de desechos contaminantes; es evidente la flacidez de los controles para evitar lesiones al medio ambiente y acaso llegará el momento en el que ya no quede nada por vigilar.
“¿No se hace otra cosa que discursos para evitar las inundaciones periódicas, la erosión y la desertificación?” Lo que se hace es socorrer a los damnificados en el instante mismo de la contingencia, luego vienen los discursos sobre la solidaridad y todo eso; mientras, sigue el arrasamiento de ecosistemas, las ciudades crecen sin control, al arbitrio de las fraccionadoras y con la venia de autoridades que se enriquecen con el tráfico de tierras. La Laguna es ejemplar en este caso; también se sabe que Monterrey ha crecido sin una planeación que ayude a prevenir desastres ahora que los fenómenos climáticos tienen un comportamiento más agresivo.
“¿Se tolera de hecho la contaminación del aire, del agua y del subsuelo?” No creo que la autoridad tome en serio las medidas preventivas ni castigue como es necesario a quienes transgreden alguna disposición; la corrupción, en este como en muchos casos, permite que no haya culpables ante delitos graves contra el medio ambiente.
Ahora sí, traigo el texto de Mario Bunge con todo y sus preguntas; debo decir que ofrezco la exposición íntegra, con todas las preguntas del doctor argentino. Agradezco la captura del artículo (tomado del libro 100 ideas, Debolsillo, Buenos Aires, 2009) a Renata Iberia Muñoz, mi hija, quien a sus 13 años me ha ayudado por primera vez en estos menesteres. Viene, pues, el texto “Subdesarrollo”:
“Me dicen que los argentinos [léase México] aún debaten la cuestión de si su país pertenece o no al Primer Mundo. En el exterior, esta pregunta nunca se formula: se da por sentado que la Argentina pertenece al Tercer Mundo, aunque no está ni de lejos tan bajo como Haití, Angola o el barrio neoyorquino de Bronx.
Pero no hay que dar por resuelta una cuestión tan importante como ésta: habría que debatirla racionalmente sobre la base de criterios objetivos y datos estadísticos, no de impresiones del turista que solo pasea por la Recoleta, ni del villero que no es habitué de La Biela ni maneja un teléfono celular.
Al fin y al cabo, si se piensa que ya llegamos a la primera división de fútbol, nadie hará el esfuerzo necesario para entrenarse en la segunda con esperanzas de ascender. Tampoco se lo hará si se piensa que el ascenso de la cumbre es tan frustrante como el de Sísifo.
Propongo un examen de ingreso al Primer Mundo que consta de cinco bolillas: la biológica, la económica, la política, la cultural y la ambiental. He aquí las preguntas clave de estos exámenes.

1. ¿La esperanza de vida de los habitantes es menor que 70 años? ¿La tasa de mortalidad infantil es mayor que 15% por mil nacimientos vivos? ¿Hay enfermedades endémicas tales como el paludismo? ¿Las mujeres tienen en promedio más de tres hijos por cabeza? ¿Es común la paternidad irresponsable? ¿El control de natalidad es infrecuente? ¿El aborto es ilegal, inseguro o inaccesible? ¿Los servicios médicos son escasos y deficientes? ¿La vacunación contra las peores enfermedades prevenibles es optativa? ¿El estado descuida las condiciones de salubridad de los lugares de trabajo? ¿Se permite el trabajo fabril de niños menores de 14 años? ¿La población carece de acceso a instalaciones deportivas? ¿Son pronunciados el sexismo y racismo?
2. ¿Hay mucha desigualdad de ingresos? Más precisamente, ¿el índice de Gini es muy superior a 0,35? ¿Hay mucha gente que pasa hambre? ¿La tase de desocupación involuntaria y crónica supera el 10%? ¿La producción esta centrada un unos pocos sectores? ¿Las empresas del Estado son menos eficientes que las privadas? ¿Las importaciones exceden con mucho a las exportaciones? ¿La razón de la deuda externa al producto interno bruto supera el 50%? ¿El porcentaje del presupuesto nacional dedicado a la educación y la salud públicas está por debajo del 10%?
3. ¿El régimen político es autoritario? ¿Está empeorando? ¿Se han conocido el golpe de Estado, la dictadura militar o el estado de sitio en el curso del último medio siglo? ¿Hay violencia política? ¿Hay movimientos guerrilleros? ¿Suele haber fraude electoral? ¿Hay plena libertad de opinión, cultos, prensa y asociación? ¿El poder judicial depende del ejecutivo? ¿El congreso se limita a corroborar los proyectos que elabora el poder ejecutivo? ¿Los ciudadanos permanecen al margen de la política entre elecciones? ¿Las mujeres carecen de derecho a voto o del derecho a desempeñar cargos públicos? ¿El porcentaje de políticos corruptos supera el 1%? ¿La política exterior es dictada por alguna potencia extranjera? ¿El país esta peleado con algún vecino? ¿Las fuerzas armadas se meten en política? ¿Hay escuadrones paramilitares? ¿La policía es corrupta y prepotente? ¿Los actos de brutalidad policial permanecen impunes? ¿Los gastos militares superan el 5% del presupuesto?
4. ¿La nación tiene religión oficial? ¿La educación esta sujeta a influencias políticas o religiosas? ¿Esta prohibido besarse en público? ¿Se persigue homosexuales? ¿El porcentaje de analfabetos funcionales supera el 20%? ¿La enseñanza primaria y la secundaria son de hecho optativas? ¿Hay un número insuficiente de escuelas técnicas (vocacionales)? ¿Las que hay son de mala calidad? ¿El porcentaje de los alumnos que abandonan la escuela primaria antes de terminarla supera el 10%? ¿Los docentes reciben sueldos y pensiones insuficientes y sin la regularidad de los militares? ¿Las escuelas son meras colecciones de aulas? ¿Se carece de escuelas de capacitación de adultos? ¿Hay ocas bibliotecas públicas? ¿Se venden menos de diez libros por año y habitante? ¿Las universidades son fábricas de diplomas? ¿Casi toda la cultura científica, técnica y humanística es importada o imitada?
5. ¿Se permiten el saqueo de los recursos naturales no renovables y la destrucción de la vida silvestre? ¿No se hace otra cosa que discursos para evitar las inundaciones periódicas, la erosión y la desertificación? ¿Se tolera de hecho la contaminación del aire, del agua y del subsuelo?

Sonó la campana. Examine sus respuestas y asígnele 1 a cada grupo de respuestas si son mayoritariamente positivas y 0 en caso contrario. Luego sume las cinco calificaciones. Si el puntaje total supera 4, usted admite que el país pertenece al Tercer Mundo. En este caso, ya sabe lo que tiene que hacer: aceptar la realidad y ponerse a hacer algo por cambiarla, en lugar de solicitar un nuevo préstamo al FMI o pedir la intervención divina.
¿Qué dice? No se oye bien. ¡Ah! Entiendo. Es verdad, no somos el último orejón del tarro. Pero, ¿le basta con que estemos en la vanguardia de la retaguardia? No le basta. Bien, por ahí se empieza. ¿Qué piensa hacer para conseguir el ascenso de división? ¿Cómo? ¿Comprar jugadores a clubes de primera? No, eso no se vale. Las recetas extranjeras fracasan porque se hacen a medida de países muy diferentes ¿Cambio de entrenador? Sí, pues esto puede ayudar, pero nunca basta. El nuevo entrenador puede no estar bien entrenado. Además, no será el quien meta los goles. Lo principal es tomar en serio el entrenamiento: ponerse de acuerdo sobre un horario riguroso y cumplirlo. De nada, no faltaba más”.
Tal vez exagero, pero creo que sacamos 5 de calificación. O sea, urge hacer algo o de plano demandar, no sin escepticismo, la inmediata intervención divina.