miércoles, julio 05, 2017

Pelotudos con doctorado














En estos días corrió por los medios electrónicos y las redes el video de un programa televisivo argentino. En él, ocho panelistas y un moderador (es un decir, pues el más inmoderado era él) debatían sobre la calidad del futbol mexicano. Según varios, no todos, de los alebrestados opinantes, nuestro futbol es una “mierda”, una “cagada”, un espectáculo “inmirable” pues nuestros jugadores “no marcan”, “no defienden”.
Sé que prestar atención a esos pelotudos es una pelotudez, pero no puedo no ceder a la tentación de comentar lo que me parecen tales burros hablando desde el desconocimiento y la víscera. Para empezar, es necesario puntualizar que tipos como esos, que hablan de futbol y luego, sin cortinilla, pasan a mostrar su xenofobia generalizada, abundan en los medios electrónicos de todas partes. Los programas gritones de tipo panel son perfectos para el pensamiento deshilachado, para el ex abrupto como única forma de la discusión. Los participantes suelen ser tan elementales que no ven contradicciones obvias: ¿cómo pueden decir que el futbol mexicano es una “mierda” y al mismo tiempo afirmar que jamás han visto un partido? Es como decir que el mate sabe horrible sin haberlo probado. Estúpido. Luego, sin solución de continuidad y ya entrados en insultos a todo lo mexicano, ¿cómo pueden asegurar que lo único bueno de México es el Chavo del 8? Quien piense/diga eso es idiota, sin más.
A diferencia de ellos, puedo decir que he visto futbol argentino y gracias a esto me resulta viable asegurar que salvo tres o cuatro equipos (Boca, River, San Lorenzo, Independiente, quizá Racing y/o Central), todos los demás son modestos, sin que esta afirmación conlleve ánimo agresivo. ¿O quieren que diga que Tigre, Quilmes, Chacarita, Rafaela y Banfield son lo mismo que Boca o River? No, no son lo mismo, e igual les quedan lejos, en todo sentido, incluido el económico, clubes como América, Guadalajara, Cruz Azul, Monterrey, Tigres, Pumas, Toluca, Santos, Atlas, Pachuca y varios más.
Uno de los panelistas, acaso el único sensato, intentó contradecir al moderador. Dijo que en la Libertadores los mexicanos llegan a las finales. Otro lo cortó de inmediato y señaló que es imposible jugar en México debido al largo viaje de “40 horas”. No reparó en que se trata de juegos a visita recíproca y que el vuelo dura nueve horas. Puro etnocentrismo babotas, imbecilidad sin atenuantes.