Este
blog cumplió quince años en 2021. Nació poco más de un año después de que inauguré
la columna Ruta Norte en el diario Milenio
Laguna y cuando ya declinaba la breve moda de los blogs, justo cuando
comenzaron a aparecer las redes sociales como Facebook y poco después Twitter.
Según pude ver, muchos blogs nacieron y murieron casi al instante en el primer
lustro del siglo; otros tuvieron una vida de pocos meses e incluso de algunos
años, pero terminaron por bajar su cortina ante la vertiginosa popularidad de las redes.
Sin
otro propósito que no sea el de almacenar, sólo almacenar, mis textos escritos
para la prensa, he mantenido abierto el blog hasta la fecha. Quizá a su
persistencia se deba que hoy tenga un promedio estable de visitas al mes, lo
que me alegra discretamente, sin moverme a especulaciones demasiado optimistas.
Mi idea es seguir con este espacio tanto como sea posible, y aportar sobre todo
textos relacionados con literatura y libros, que es de lo que más me cuadra
escribir.
Gracias
a quienes se han asomado alguna vez a este blog. Ojalá que hayan encontrado
algo apreciable en sus renglones.