Gerardo García y
Fernando Fabio Sánchez vuelven a su tierra, La Laguna, cada que pueden. El
primero es profesor universitario en Texas y el segundo es lo mismo, pero en
California. Dado este eterno retorno vacacional, hemos decidido organizar a
cada vuelta alguna actividad literaria. Comenzaremos hoy, con la presentación
de un libro de cuentos policiales. Hemos convocado al público al restaurante El
Danubio (Escobedo 284 ote., Torreón), sección del bar, a las 7 de la tarde. Como
adelanto, va aquí un fragmento el prólogo escrito por Gerardo:
LatiNoir: Muerte con pasaporte (NitroPress-UANL, 2017)
ofrece al público lector una colección de cuentos policiales escritos por
autores de cinco países latinoamericanos: Argentina, Colombia, Cuba, Brasil y
México. Los textos incluidos en este volumen dibujan un mapa de la reciente
producción de una vertiente literaria inventada por Edgar Allan Poe, y que se
ha convertido en un fenómeno global en sus derivaciones novelísticas,
cinematográficas y televisivas. A partir de la aparición en 1841 del primer
cuento policial, “The Murders in the Rue Morgue”, innumerables plumas han aportado modelos para narrar
las andanzas de incontables detectives. Desde el relato enigma inglés simbolizado
en Sherlock Holmes y Hercule Poirot que resuelven crímenes a través de un
alarde de razonamientos matemáticos, hasta la ficción del hard-boiled
estadunidense con sus detectives arquetípicos,
Philip Marlowe y Sam Spade, los cuales se tienen que enfrentar al mundo violento provocado por la
gran depresión de 1929, la narrativa policial anglosajona ha ejercido una
enorme influencia en los escritores de habla hispana y portuguesa de nuestro
continente. Tal influjo se plasma en antologías publicadas en un periodo de
medio siglo, y asimismo, en ellas se manifiesta la evolución en la práctica de
un género en el cual se inserta LatiNoir:
Muerte con pasaporte.
En 1964 el académico
estadunidense Donald Yates publicó El cuento policial latinoamericano, una antología que incorpora
textos apoyados en la fórmula del relato clásico inglés, como “El embrollo del
reloj” de la mexicana María Elvira Bermúdez, y “El caso de Ada Terry” del
argentino Leonardo Castellani, o su parodia: “Las doce figuras del mundo” de H.
Bustos Domecq (seudónimo tras que se oculta la bicéfala autoría de Jorge Luis
Borges y Adolfo Bioy Casares)…